Descripción

Ubicado al costado oriente de la Plaza de Armas de Freirina, en la III Región de Atacama, el edificio Los Portales fue construido en 1870 con la intención de servir de "Casa de Gobierno" y cumplir así un rol fundamental en la obtención del "Título de Ciudad" de la antigua "Villa de Santa Rosa de Freirina", el que sería otorgado mediante decreto gubernamental en 1874. Por esta razón, el edificio tiene un importante valor simbólico al ser un elemento vital en la categorización urbana de la localidad.

La construcción se basa principalmente en tabiquería en pino Oregón con adobillos contenidos, revocado en barro y techumbre de tejuelas de madera. De estilo neoclásico, el edificio se distribuye en torno a un patio central rodeado de corredores por columnas de fuste octagonal. Las habitaciones rodean el patio, abriendo sus puertas hacia él; mientras las ventanas lo hacen hacia el exterior del edificio. Su fachada principal da la cara a la plaza, lo que apela a su intención de conexión pública. Ésta toma la forma de un portal en volumen más alto que el resto del edificio y está conformada por 10 columnas octagonales unidas en arco de medio punto, manifestación propia del estilo que representa.

Estructuralmente la construcción es de una base sólida. Resistió sin mayores inconvenientes el fuerte sismo de 1922 que afectó a Atacama; su deterioro es el natural del paso del tiempo. En 1981 la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas sometió el edificio a un proceso de restauración bajo la dirección del arquitecto Alberto Calvo; y en 2012, en el marco del proyecto "Puesta en valor del Patrimonio" se vuelve a diseñar un proyecto de rescate y restauración, esta vez a cargo del arquitecto Sergio Cabezas.

El edificio, en diálogo con la Iglesia Parroquial de la ciudad y las construcciones y casas de barro que rodean la plaza, configuran un conjunto histórico que perpetúa el pasado del espacio. En este contexto, en 1980 el Ministerio de Educación a través del Consejo de Monumentos Nacionales decide declarar al edificio como Monumento Histórico apelando a su representatividad como parte del patrimonio histórico y cultural del país. El inmueble, parte de la historia y la memoria colectiva de los habitantes de Freirina, alberga actualmente las oficinas del municipio.

Decreto 8377 (1980)